Bodas de Plata de la Escuela Primaria Nº 51

El 24 de marzo del corriente año, la Escuela Primaria Nº 51 “Soldados de Malvinas” de Troncos del Talar, cumplió sus “Bodas de Plata”. La Sra. Ana María Pazos, ex Directora de este servicio educativo, estuvo presente en el Acto realizado el 16 de setiembre para rendirle su homenaje con estas palabras: Parece mentira pero ya han pasado 25 años de la inauguración de esta escuela, “Mi escuelita” como la llamaba la Sra. Betty David cuando nos visitaba en la Escuela Nº 20 de Pacheco. Un par de años más tarde asumí como Directora y ahí fue la gran sorpresa, llegaban junto conmigo la primera secretaria titular Sra. Mónica Cervantes y un joven docente varón, Walter Villarruel. Todo era chiquito, poquitos alumnos en cada grado, 300 entre ambos turnos y todo era nuevo para nosotros que veníamos de otras realidades. Fuimos creciendo, nos acomodamos y conformamos una comunidad educativa magnífica. Se consiguió a la empresa Johnson de Argentina como padrinos y allí encontramos y realizamos proyectos que nunca habíamos soñado. En ese trayecto aparecieron también los famosos “módulos”, menuda sorpresa que nos llevamos ya que no teníamos idea para qué estábamos haciendo ese perfeccionamiento a contra turno y pagado. La comunidad de Los Troncos encontró reunidas a las 4 escuelas realizando las reuniones por turno, mes a mes, en cada una de ellas lo que resultó muy enriquecedor ya que se hizo un gran intercambio de conocimientos. Sin darnos cuenta apareció la EGB y con ella todo el trastorno y el movimiento que significó para una escuela chica el aumento vertiginoso de su matrícula y su planta funcional. Mónica, autodidacta, se enfrentó con un Contralor diferente pero salió muy airosa del paso. Nadie dejó de cobrar. Cambiaron las Vicedirectoras hasta que llegó la Sra. María Teresa Pegoraro como titular hasta que se jubiló. Luego vino la actual Directora que comenzó como Vice transitoria y ahí junto con la Prosecretaria Sra. Inés Fagúndez conformamos un equipo, indisoluble hasta el día de hoy. Fuimos la mesa de cuatro patas que sostuvo a la Institución unida frente a los avatares que la cotidianeidad nos ofrecía. Los constantes cambios de programas y proyectos, las innovaciones que nos hacían retroceder en lugar de avanzar, la improvisación sin considerar la realidad escolar actual hicieron que fuera tan grande el desgaste que tres de las cuatro patas resolvimos finalizar nuestra labor conjuntamente en un lapso de pocos meses. Hoy, habiendo transcurrido ya más de tres años de nuestras jubilaciones recordamos con alegría pero sin nostalgia todo lo hecho, lo logrado y especialmente el orgullo de saber que pusimos nuestro granito de arena para que la Escuela 51 fuera considerada la mejor del distrito. Personalmente tengo la satisfacción de encontrarme con alumnos en la calle que no sólo no me dan vuelta la cara sino que se acercan a saludarme, me mandan e-mails por el facebook y me agradecen no sólo la educación que se les brindó acá sino los valores que se les inculcaron empezando por el respeto hacia los demás, el cumplimiento de sus deberes como ciudadanos y el concepto de familia que tuvieron con sus docentes. Agradezco a Dios el haberme permitido contar con un personal de lujo, en todos sus niveles. Sin ellos hubiera sido imposible lograr nada. El compromiso de docentes fundadoras y los que se fueron agregando lo mismo que el de las auxiliares que nunca dijeron “esto no me corresponde”. Ni hablar de la tarea desinteresada que realiza la Asociación Cooperadora con su constante presencia y ayuda en las necesidades básicas. Para finalizar le deseo a Lily toda la suerte del mundo para continuar esta empresa que comenzó muy humildemente hace 25 años y que seguramente con su capacidad podrá mejorar y superar la gestión nuestra. Salud y felicidades querida Escuela 51.